Hijo de un obrero ferroviario de León, Buenaventura Durruti fue una figura clave de la lucha obrera hace un siglo, entre el fin de la monarquía, la República y la Guerra Civil. El músico Guillem Caballero y el escritor Tuli Márquez firman un musical que recorre su biografía y reivindica también el papel de su compañera, Mimi Mueran, fundamental en el anarquismo y el feminismo. Un espectáculo coral a cargo de la compañía Les Solidàries.
Pau Albà: batería, percusiones y voces
Xavier Garcia: bajo y voces
Joan Colomo: guitarra y voces
Irene Molenz: guitarra y voces
Laura del Pino: trompeta y voces
Júlia Soler: trombón y voces
Guillem Caballero: teclados y voces
Jordi Castells: imágenes y vídeo
Me gustaría que sonaran como hilo musical en las cafeterías de especialidad de la calle Verdi, y que los dueños de los locales no pudieran quitar nunca ese hilo musical. Que sonaran también de noche, con el local cerrado y la persiana bajada, y que la gente que pasara por delante escuchara un murmullo detrás de la puerta. Un murmullo que sonara a estimulante conspiración colectiva con broma final, a reunión de garaje donde cuatro perros virtuosos a los que les cuelgan mucho los testículos tienen un amplificador, ceniceros, guitarras y un teclado… donde comentan que aman a los Beatles y uno de ellos afina la Fender mientras un trozo de romero le cuelga de los labios. Un murmullo que es como un sueño de Terry Gilliam después de haber jugado con una ouija que solo se vende en la sede de la CNT. Un murmullo en el que se siente el alma de Durruti y una canción que, como la alegría, se agarra a la garganta y solo se escucha cuando alguien te gusta mucho.
Pol López
Actor